Panorama 2015 en Argentina: “Necesitamos que el conflicto aparezca”

Fortunato y Malimacci

ARGENTINA

Buenos Aires-

Por Leonardo Félix

En un año que se anticipa de intensa pugna electoral en Argentina, el Dr. Fortunato Malimacci y el periodista Washington Uranga, en el marco del Retiro nacional de pastoras y pastores de la Iglesia Evangélica Metodista Argentina, ofrecieron una intensa charla debate abierta.

En el marco de un año signado por las elecciones en distintos niveles parlamentarios de Argentina, incluyendo la elección presidencial de octubre de 2015, el Dr. Fortunato Malimacci y el periodista Washington Uranga, ofrecieron el pasado 28 de febrero en Buenos Aires una Charla debate abierta, sobre los posibles escenarios que se pueden anticipar de cambio y permanencia en la actual política nacional.

El reconocido periodista y editorialista del diario Página 12, Washington Uranga, Director de la Maestría en Comunicación Institucional de la Universidad Nacional de San Luis y otras universidades en Argentina, comenzó su exposición reconociendo lo difícil de hacer un análisis complejo en una trama tan diversa en lo social y político como es la Argentina de hoy, la tentación frente a esta complejidad, continúo diciendo es “caer en una lógica binaria que nos pone en la categoría de buenos y malos como si todo fuese tan simple de analizar. El que no piensa igual que yo es un enemigo, etc, etc. El primer esfuerzo que hay que hacer, dice Uranga, es pensar con profundidad la realidad que vivimos. Lo cual no es simple, partiendo de la base que ya nadie asume la objetividad de la noticia como tal. En todo caso, saber que existe una subjetividad de la noticia la cual, debemos asumir. Los medios en este sentido, no son exclusivamente medios de comunicación. Son patas de complejos políticos, económicos culturales de corporaciones que trabajan para sus propios intereses.

Uranga definió en cuanto al momento actual que, “si bien estamos viviendo momentos tensos en la discusión política actual, afortunadamente y como resultado de la democracia que tenemos, sobre todo del 2002 en adelante, hay debates posibles porque esta Argentina fue construyendo espacios de participación y expresión, y hoy hay más lugares para expresarnos libremente en lo que pensamos”.

Entonces – sigue diciendo – “aflora algo lógico y normal que es el conflicto. El conflicto está a flor de piel. No es malo que el conflicto esté ahí…necesitamos que el conflicto aparezca. El tema es como procesamos y nos paramos frente al conflicto como comunidad política. Siempre que el conflicto apareció en forma evidente nos llevó a lugares no deseados. De este modo, se alimenta la lógica del miedo. Cuando el miedo aparece nos lleva  a puntos donde no se quieren volver. Esto es un tema a trabajar, como sociedad, como comunidad religiosas, como grupos de políticos, intelectuales porque aparece a diario”.

“El conflicto no es simplemente binario, entre un extremo y otro, entre buenos y malos, etc. El mismo atraviesa distintos partes y estratos de la sociedad. Pensemos que está pasando con la construcción de alianzas políticas en estos días en la Argentina. Se generan alianzas de sectores inimaginables, simplificando el panorama político y diluyendo el “conflicto” en sí”.

¿Cómo se plantea la participación de las estructuras políticas? – se pregunta Uranga – Del 2001 a esta parte las estructuras políticas partidarias no han sido tan relevantes como antes en la participación ciudadana, porque hoy existen otros canales de participación.

Pero una cosa en participar, y otra es generar espacios de poder. Un ejemplo claro de esto lo representan las manifestaciones callejeras en el país. El problema de estas “marchas políticas” reclamando una u otra cosa, es como las mismas, en tanto espacio de participación se convierten en reales generadoras de “poder político”.

A su vez, el Dr. F. Malimacci, autor de reconocidos libros como: “Religión y política. Perspectivas desde América Latina y Europa” , “Modernidad, Religión y Memoria” , “Guía de la diversidad religiosa de Buenos Aires”, “Nacionalistas y nacionalismos” entre otros, abordó la compleja trama política social argentina desde el punto de vista religioso.

Estos problemas presentados también se viven también desde el espacio religioso – comenzó diciendo Malimacci. Lo religioso juega un rol fundamental en lo político, social y cultural. Lo peor, utilizando las palabras de Uranga, son los pares binarios. Lo bueno, lo malo, lo mundano y extramundano, lo sacro y lo profano.

En nuestras culturas – dice Malimacci – y en los conceptos de las ciencias sociales siguen estando estos pares binarios. Porque estos pares “binarios” entusiasman, dan fuerza. Llenan de pasión a la gente. El problema es que cuando lo político entra en crisis, lo religioso quiere suplantar ese espacio caótico. Frente a este panorama Hay que rever los conceptos permanente. Entender que la secularización en América Latina se ha dado quebrando el monopolio que la Iglesia Católica Romana tenía en estas áreas.

Ambos expositores, concluyen que el peligro de estos pares binarios (lo bueno y lo malo, el cielo y la tierra, lo puro y lo impuro) es eliminar la complejidad de la realidad y asumirnos entusiastamente en una punta u otra de esta “polarización” que en muchos casos, los medios, así como el factor religioso alimentan a diario.

“El problema de la sociedad actual, concluye Malimacci – es que ha perdido el sentido de lo complejo. Disociar como si fuese posible, la política del poder. Asumir esta complejidad de  opiniones y opciones y preferencias políticas y religiosas es parte de lo que hay que asumir como sociedad en este tiempo”.

 Foto: Uranga y Malimacci durante la exposición

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *