Evangélicos pedirán diálogo al gobierno por el crecimiento del desempleo y la pobreza

 

NICARAGUA

Por Trinidad Vazquez-

La Federación de Iglesias Evangélicas de Nicaragua (FIENIC) prepara una agenda para solicitar diálogo al gobierno preocupada por la situación de pobreza que vive Nicaragua y la exclusión de enorme cantidad de jóvenes del sistema educativo y del empleo.

El desempleo preocupa profundamente a las iglesias evangélicas, confirmó el Rector de la Universidad Evangélica de NICARAGUA (UENIC), Dr. Benjamín Cortez, quien es también dirigente de la Federación.

Cortez declaró a medios radiales que un número importante de iglesias e instituciones cristianas se han convocado para formar la FIENIC, con el propósito de contribuir al proceso de unidad nacional de las iglesias, de consolidar los programas y ministerios de las comunidades de fe y para formular una agenda de diálogo con el gobierno.

Expresó que desde las Iglesias se siente hace largo tiempo la necesidad de entrar en diálogo para abordar con el gobierno temas relevantes, como la creación de empleos estables que puedan reducir la migración de nicaragüenses hacia los restantes países de Centroamérica, Estados Unidos y España.

“Estamos profundamente preocupados por los crecientes niveles de pobreza, el desempleo y la exclusión de más de medio millón de niños del sistema educativo”, dijo el dirigente evangélico.

El propio Cortez hizo estudios que revelan que hay alrededor de 300 mil estudiantes que en la última década no han podido ingresar a la universidad por falta de recursos.

El pastor de la iglesia menonita, Jairo Arce, dijo que apoya la Federación porque viene a fortalecer a la misma iglesia en su dinámica  de evangelización, crecimiento  y organización de las iglesias independientes  y ministerios cristianos nacionales para ser interlocutora  ante el Gobierno, cualquiera sea éste.

La idea es proponer  al gobierno, desde la visión de los evangélicos,   proyectos que coadyuven  al desarrollo del país  y al mismo tiempo hacerle saber que como nicaragüenses  y cristianos tenemos derecho a que no  se nos mire como  ciudadanos de segunda clase.

La Federación es una iniciativa que surgió  posterior a la pérdida del poder del  Frente Sandinista en los años 90 y se discutió inicialmente con UENIC, el Centro Intereclesial de Estudios Teológicos y Sociales, el Consejo de iglesias Evangélicas (que nunca asistió a la reuniones), la Alianza Evangélica de Nicaragua y el Consejo Nacional de pastores, y ahora se vuelve a retomar la idea de con más  fuerza.

Algunos evangélicos interpretan que  esta Federación es   apoyada por el gobierno sandinista para restar importancia a la precandidadura del pastor Saturnino Serrato y otros comentan que el pastor Omar Duarte, presidente de esta Federación iría como presidente en la formula de Serrato.

Santiago Álvarez, líder  evangélico, sostiene que al lanzar  de nuevo la Federación no se hizo bien el procedimiento  porque no tomaron en cuenta otras organizaciones evangélicas fuertes, como la iglesia Asamblea de Dios y la Iglesia de Dios en  Nicaragua. Afuera, dice Álvarez, esta Federación se mira  como una división y no como unificación.

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