NICARAGUA-
“Entonces Pedro, abriendo su boca, dijo: Por verdad hallo que Dios no hace acepción de personas; Sino que de cualquier nación que le teme y obra justicia, se agrada”. (Hechos 10:34-35)
Si Dios no hace acepción de personas, nosotros tampoco debemos de hacerlo.
Distintos encuentros en países de la región
En el marco de este decenio dedicado a los Afro-descendientes, la Pastoral de Negritud del CLAI desde la coordinación continental re-contactó a sus 9 referentes y ha mantenido una comunicación constante en la implementación de 8 actividades nacionales de un total de 9 planificadas durante este año bajo el tema generador y transversal en cada país que fue: Espiritualidades de los pueblos afro-descendientes y la violencia del racismo actual. Este, a su vez, permitió reflexionar y debatir un total de 27 sub- temas derivados, que vino a fortalecer la Pastoral de Negritud a nivel continental.
Alcanzamos nuestro objetivo General al implementar este proceso de sensibilización y capacitación en derechos humanos, reflexión y acompañamiento en la espiritualidad e interculturalidad, capacitación de liderazgos para incidencia socio política con respecto a la cosmovisión e identidades afro descendiente latinoamericanas y caribeñas.
Los espacios de conferencias, foros, seminarios y talleres ejecutados sensibilizaron y capacitó a un total de 216 líderes y lideresas Afros de las diversas iglesias y redes de la sociedad civil. Estos fueron muy impactados-as por todas las enseñanzas y experiencias personales compartidas en cada actividad. En efecto planificaron actividades nacionales y locales en pro de erradicar la violencia y la discriminación racial en sus respectivos países.
Compartimos de manera virtual y entregamos físicamente en cada país 20 ejemplares del libro publicado por el CLAI sobre “La Realidad del Racismo Actual hoy en América Latina y el Caribe”. Logramos entregar más de 200 ejemplares de dicho libro articulador de los procesos para la reflexión y el dialogo y como referencia para continuar con la reflexión del tema en cada país y esto ha generado muchas reacciones de los asistentes en cada actividad. Además, lo han promocionado y están utilizándolo como un material pedagógico y de referencia para predicar y enseñar en las diversas instituciones eclesiales y sociales.
Los y las coordinadores-as de cada país procuraron realizar sus mejores aportes o insumos en cada actividad. Estos han sido divulgados mediante correo electrónico permitiendo una retroalimentación y la reflexión continua a nivel continental, reconociendo que el racismo está vigente en cada uno de los países y se expresa mucho en el lenguaje semántico y corporal, que promueve la opresión, la discriminación, la marginación que comienza con el color de la piel y termina con el estatus social y económico de la persona.
El principal logro es haber reunido a diferentes líderes y lideresas afros de Iglesias e instituciones pro afro a través de sus representantes a fin de tratar el tema de convocatoria. Haber logrado la ejecución de las 8 actividades ha sido un aporte y un avance en la lucha contra el racismo y la discriminación en el continente latinoamericano y el Caribe.
Todos los talleres tuvieron buena acogida, motivaron, energizaron, causó mucho gozo y despertó muchas esperanzas en los y las participantes. Se aportó una serie de propuestas y desafíos para el seguimiento de este proceso, tales como: Estamos desafiados-as a: dar continuidad a este proceso, a cambiar nosotros mismos. Cambiar la manera de cómo nos comunicamos. Reclamar nuestro color en nuestro documento de identidad. Fomentar la igualdad a la manera de Cristo. Nuestros textos y escuelas deben reflejar nuestra identidad. La mujer negra debe tener su espacio en igualdad de derecho del Estado.
LECCIONES APRENDIZAJES Y SEGUIMIENTO PARA EL 2016:
El rol que desempeñan los liderazgos eclesiásticos usualmente dista de las necesidades de los creyentes. Los liderazgos eclesiásticos suponen que vincular la iglesia a temas de derechos humanos es vincularse en asuntos políticos impropios al rol de la iglesia, cuando por el contrario, las expresiones eclesiales pueden ayudar a revertir como organizacionales sociales la situación de olvido e indiferencia ante las situaciones de exclusión que es lo no-evangelio de Cristo. Jesús no discriminó a nadie y es nuestro ejemplo a seguir.
La iglesia debe cumplir su rol de hablar desde la Biblia para educar, Re-leer la Biblia e interpretar justamente su mensaje, Predicar la igualdad. Propiciar un evangelio intercultural consiste comprender la espiritualidad y cosmovisión afro-descendiente a partir de las exclusiones y reivindicaciones de derechos postergados tanto al interior de la vida de nuestras iglesias como en razón a la sociedad civil. Mientras no se respeten los derechos de las personas, siempre habrá racismo, así que para evitar este problema, se deben enseñar a todas las personas a respetar, compartir, a no juzgar a los demás por como son o por quien son, y así quizá podremos ver un futuro en que todas las personas convivan juntas sin ser juzgados.
Expresamos nuestra profunda gratitud a todos y todas que forma directa e indirecta nos apoyaron y acompañado, de manera especial a los y las integrantes de la Plataforma Continental por vuestra entrega voluntaria e incondicional servicio como coordinadores-as nacionales en sus respectivos países: Brasil- Msc. Darli Alves, Venezuela- Msc. Romer Portillo, Perú- Dr. Jorge Ramírez, Colombia- Licda. Nora Liliana, República Dominicana- Rev. Antonio García, Panamá- Dra. Verona Salmon, Honduras – Rev. David García, Nicaragua- Ing. Ashley Hodgson, Costa Rica- Pendiente. De seguimiento el próximo año quisiéramos sistematizar todos los insumos aportados mediante las 8 actividades implementadas y publicar un segundo libro, además de realizar una segunda conferencia internacional con el fin de seguir publicando los insumos.
“Sueño con un mundo sin racismo, sin discriminación. No es un mundo de iguales, porque no creo en la igualdad tenemos 300 años de ser iguales e igual seguimos sufriendo. Creo, en cambio, en la equidad, donde todos tengamos los mismos derechos y las mismas oportunidades”
(Quince Duncan – Reconocido escritor costarricense)