SUIZA-
El ministro alemán del Interior dijo que las iglesias en Europa tienen un papel decisivo en la respuesta a la llegada de refugiados al continente europeo. El Dr. Thomas de Maizière pronunció estas palabras en una reunión de gobiernos, organismos de las Naciones Unidas, iglesias, grupos religiosos y organizaciones de la sociedad civil celebrada en Ginebra el 18 y 19 de enero.
“Gestionar la crisis mundial de refugiados no es una tarea que incumbe únicamente a los encargados de formular las políticas gubernamentales”, observó De Maizière en su discurso de apertura de una conferencia de alto nivel de dos días de duración sobre la crisis de los refugiados en Europa.
El año pasado, más de un millón de personas emprendieron un peligroso viaje por mar o por tierra para llegar a Europa. La mayoría huía de los conflictos, la violencia y la persecución que asolan Siria, Afganistán e Iraq. Se calcula que al menos 3700 murieron cruzando el mar.
Al mismo tiempo, el número de refugiados sirios que han huido a los países vecinos, como Turquía, el Líbano y Jordania, es mucho mayor que el que ha intentado alcanzar Europa.
“Los extraordinarios desafíos humanitarios, sociales y políticos que plantea la crisis de refugiados muestran que los gobiernos, la sociedad civil, el mundo empresarial y también las iglesias tienen una responsabilidad compartida”, afirmó De Maizière, un protestante militante, en su alocución.
“Como piedra angular de la sociedad, las congregaciones de las iglesias son quienes a menudo prestan asistencia”, dijo. “Y aún así se necesita más”.
La conferencia celebrada en el Centro Ecuménico ha sido organizada por el Consejo Mundial de Iglesias (CMI) en colaboración con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
El objetivo de la reunión es lograr compromisos para el fortalecimiento de respuestas coordinadas a la crisis que incluyan la aplicación de políticas de migración e integración y la creación de mecanismos adecuados para que los movimientos de refugiados a través de Europa sean ordenados y seguros.
En su discurso, que abarcó muchas cuestiones, De Maizière indicó que era urgente llegar a soluciones comunes en la Unión Europea para ocuparse de los refugiados y revisar los procedimientos de asilo “disfuncionales”. Solo unos pocos Estados miembros de la UE, y en particular Alemania, están acogiendo a la gran mayoría de refugiados que llegan a Europa, declaró, “mientras otros Estados miembros están a la expectativa”.
Pero al mismo tiempo, puntualizó, los países europeos no disponen de recursos ilimitados para acoger a refugiados y migrantes de otras partes del mundo, por lo que exhortó a adoptar medidas coordinadas destinadas a reforzar las fronteras externas de la Unión Europea.
En respuesta al discurso del ministro alemán, la arzobispa Antje Jackelén de la Iglesia de Suecia advirtió que debía evitarse que se considerara la necesidad de controlar el flujo de refugiados como el mensaje principal, ya que podría tener efectos contraproducentes en la opinión pública.
Asimismo, alertó contra el auge de la xenofobia y la islamofobia, diciendo que las iglesias debían combatir “la instrumentalización de la fe cristiana para legitimar el odio hacia el islam”.
El propósito de la conferencia de alto nivel es abordar los desafíos planteados tanto en los países de origen y tránsito, como en los países donde las personas buscan acogida y refugio.
Al dar la bienvenida a De Maizière al Centro Ecuménico, el secretario general del CMI, el Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, hizo hincapié en la necesidad de instaurar un proceso político de paz para Siria y otros países, ya que de lo contrario “no podremos responder a las situaciones a las que nos vemos confrontados hoy”.
Tveit describió la situación como una crisis no solo para los refugiados que han llegado a Europa, sino también como una crisis en términos de cómo Europa está haciendo frente a la situación. “También podemos decir que se trata de un desafío que interpela al alma de Europa”, declaró Tveit.
Más información sobre el trabajo por la Migración y justicia social del Consejo Mundial de Iglesias (lo que incluye más documentación de la conferencia)
Fuente: CMI