Pesar por el el fallecimiento del Rev. Juan Ramón de la Paz Cerezo

Rev. Juan Ramón de la Paz Cerezo

CUBA-

“Que su ejemplo y su fe en el Cristo de la unidad y el amor, nos sigan acompañando cada día en nuestro andar”, dice el Mensaje del Consejo de Iglesias de Cuba ante el fallecimiento del Rev. Juan Ramón de la Paz Cerezo.

Los caminantes de Emaús han regresado a Jerusalén junto a los once, allí el mismo Señor resucitado aparece ante ellos nuevamente. Y díjoles: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día; y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y la remisión de pecados en todas las naciones, comenzando de Jerusalén. Y vosotros sois testigos de estas cosas. Lucas 24: 46-48

Hoy es tercer Domingo de Pascua. La noticia llegó temprano en la mañana. El amigo, el sacerdote, el esposo, el padre, el abuelo, el patriota, el cubano, el testigo fiel, Juan Ramón de la Paz Cerezo, ha pasado a las moradas eternas, va al encuentro de aquel que le ama entrañablemente, de aquel que fue el sentido de su vida y a quien la dedicó siéndole fiel a su prédica, a su ejemplo y a su verdad; yo no he venido para ser servido sino para servir.

El Consejo de iglesias Cuba extiende a sus hijos, familia y a su Ilma. Obispa Griselda Delgado del Carpio, de la Iglesia Episcopal de Cuba, las más sentidas condolencias, y el testimonio de gratitud a Dios y la confirmación de nuestra fe en el Resucitado.

El Rev. Juan Ramón de la Paz Cerezo, es parte esencial e imprescindible de la historia de la iglesia y el movimiento ecuménico cubano, un baluarte de la fe. Su apego a la ética y la vida cristina, su enfoque pastoral en todo momento y su amor por su iglesia y por su pueblo, le hicieron ganarse nuestra admiración, amor y respeto. Como la historia de más de cien años nos ha mostrado, la pastoral de la Iglesia Episcopal tiene una fuerte raíz patriótica, que es parte de su esencia y de su fortaleza.

El Rev. Juan Ramón de la Paz ha sido heredero digno, testigo firme e incansable luchador por esos principios. Hoy que nuestro buen Dios recibe en sus brazos a este querido hermano, le pedimos que su ejemplo y su fe en el Cristo de la unidad y el amor, nos sigan acompañando cada día en nuestro andar, para continuar en los caminos del ecumenismo, unidas y unidos para servir.

Rev. Antonio Santana Hernández. Presidente

Rev. Joel Ortega Dopico. Secretario Ejecutivo

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