La trata de personas y el papel de los medios de comunicación

trata de mujeres

CANADÁ-

Organizado por la Iglesia Luterana Evangélica Martin Luther en Toronto, una serie de Charlas de Mesa ha estado explorando “asuntos que importan” como parte de las actividades en curso en todo el mundo con motivo del 500 aniversario de la Reforma luterana, la serie comenzó el 26 de abril con una discusión sobre la justicia restaurativa, y concluyó el 21 de junio con una discusión sobre la trata de personas. La Asociación Mundial para la Comunicación Cristiana- WACC estuvo representada por la Dra. Sarah Macharia, Directora de Programas de Género y Comunicación.

WACC está contribuyendo a las celebraciones de la Reforma con un número especial de su revista Media Development y participará en una escuela de verano sobre “Derechos de comunicación en la Sociedad Digital Global” que tendrá lugar en Wittenberg, Alemania, del 31 de julio al 4 de agosto de 2017.

La trata de personas viola los derechos humanos básicos, incluido el derecho a la vida, la libertad y la seguridad; El derecho a estar libre de esclavitud y servidumbre; Libertad de la tortura o de tratos crueles o degradantes; Y el derecho a trabajar en condiciones justas y favorables.

La trata de personas viola también el derecho a la dignidad humana; a la integridad física y psicológica; el derecho a no ser vendido en el matrimonio; el derecho a la familia ya la intimidad; y el derecho a no ser discriminado por ser mujer.

Hablando del papel de los medios de comunicación en la lucha contra la trata de personas en Canadá y en todo el mundo, la Dra. Sarah Macharia, señaló que “los medios de comunicación son los principales impulsores de la difusión de información o información errónea sobre la trata de personas. Lo que sabemos o no sabemos determina nuestra respuesta a él, lo que se informa y cómo se informa, va de alguna manera en la configuración de la política y la agenda de acción del Estado, y tiene implicaciones para los traficantes y los traficados “.

“La responsabilidad periodística radica en la comunicación efectiva de noticias relevantes. Las consideraciones incluyen el ángulo de presentación de informes, la sensibilidad al lenguaje que victimiza a los sujetos y la medida en que el crimen está expuesto o camuflado “, agregó.

El sitio web de la Iglesia Luterana Evangélica de Martin Luther señala que las charlas de mesa fueron inspiradas en los temas del aniversario de la Reforma: Salvación por gracia, los seres humanos no están a la venta y la creación no está a la venta. Vemos la reforma de nuestra iglesia y nuestra sociedad como un proceso continuo y queremos comprometernos con el mundo que nos rodea para servir e inspirar a la gente “.

Foto cortesía de APMM : El Refugio de Mujeres Migrantes de la Casa Bethune opera dos pequeños pisos ubicados en el centro de Hong Kong, hay literas para 15 residentes en cada refugio, pero la mayor parte del tiempo la casa está ocupada por más personas

WACC está trabajando para una mayor conciencia de la trata y las personas desplazadas en colaboración con su Misión Asia-Pacífico para los Migrantes (APMM), con sede en Hong Kong, en campañas que involucran a los migrantes de base en la importancia de los derechos de comunicación y la protección de los derechos y la dignidad de los migrantes Y sus familias.

La Región Europa de WACC también está implementando un proyecto de monitoreo de los medios de comunicación para promover el derecho de los refugiados a hablar en su propio nombre, evaluar su representación en los medios de comunicación, mantener buenas prácticas periodísticas y aumentar la visibilidad de las voces y redes de refugiados.

La trata de personas es una forma de violencia contra la mujer, dado que el 71% de las víctimas de trata, según las estadísticas de la oficina de la ONU sobre drogas y delincuencia en 2016, son niñas y mujeres. La explotación se dirige a las mujeres migrantes que soportan duros ambientes de trabajo y aumentan su vulnerabilidad a la explotación sexual para proveer a sus familias. Sin embargo, los niños y los hombres también son víctimas de la trata.

“Todos tenemos la responsabilidad moral de poner fin al tráfico. Si eso significa tomar decisiones conscientes sobre lo que compramos y cuidar de saber cómo nuestros estilos de vida contribuyen a la explotación de los trabajadores de las fábricas de migrantes “, dijo la Dra. Mary (Joy) Philip, durante las conversaciones de mesa .Ella es Profesora Asistente de Teología Luterana Mundial y Misión en el Seminario Luterano de Waterloo.

La Dra. Sarah Macharia recomendó que un lugar para comenzar sea educando al público sobre los hechos y generando más debate. Dijo: “Es importante saber lo que está pasando y hacer uso de lo que está disponible para mantener a los medios responsables; Ser ciudadanos activos; y seguir educándonos a nosotros mismos “.

Fuente: WACC

Traducción: Claudia Florentin para ALC Noticias

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