PUERTO RICO-
“Todo a nuestro alrededor es caótico luego del paso del huracán María. estamos prácticamente incomunicados, sin energía eléctrica- algo que calculan será por meses-, sin internet y con enormes pérdidas materiales de gente de nuestra comunidad. Oren por nosotros, el panorama es desolador”, son las palabras del Rev. Jorge Daniel Zijlstra, reportándose desde San Juan de Puerto Rico, este fin de semana. Por fin ha logrado una comunicación y decide que ALC sea un medio para canalizar el estado de situación que viven.
La comunidad presbiteriana de Lewittown, que él pastorea, ha sufrido grandes daños en el templo, que tiene parte del techo volado y con las instalaciones inundadas. Algunos miembros de esa iglesia han perdido todo. Este domingo compartieron un devocional en el espacio devastado. Necesitamos, me dice al teléfono, tener comunicación con nuestras hermanas iglesias para que sepan cómo estamos. El pastor y su familia se encuentran bien.
Los saqueos a supermercados están a la orden del día, no hay agua, la gente hace filas en las estaciones de servicio y ya empezaban a tener la llegada de aviones y barcos con suministros y ayuda. “Nadie en la isla tiene registro en su memoria de un huracán así”, dice Jorge.
Jorge pidió a ALC que transmita estas noticias a la comunidad ecuménica ya que no pueden llamar más que por breves momentos y desde diferentes lugares donde se activan telefonía fija.
Activemos la ayuda, las oraciones y estemos atentos y atentas a las formas de colaboración con nuestras comunidades hermanas en Puerto Rico.
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