Participantes taller cambio climático e incidencia
EL SALVADOR-
Del 24 al 26 de octubre Organizaciones basadas en la fe aglutinadas en ACT Alianza se reunieron en San Salvador para trabajar sobre el Fortalecimiento de capacidades de incidencia en la implementación del Acuerdo de París”. Este taller es una actividad que ACT Alianza está realizando a nivel global, a través de talleres regionales, para elevar el nivel de incidencia por la Justicia Climática de iglesias, organizaciones basadas en la fe, líderes religiosos y de sociedad civil. En América Latina el taller participaron 20 líderes ecuménicos, sociales y profesores/as universitarios provenientes de 10 países de América Latina para intercambiar sus experiencias y conocimientos.
La Alianza ACT es una alianza global de más de 130 iglesias y organizaciones relacionadas con iglesias, trabajando en 140 países. Los miembros de la Alianza están comprometidos a trabajar juntos por una comunidad mundial en que toda la creación de Dios viva con dignidad, justicia, paz y pleno respeto por los derechos humanos y el medio ambiente. Los objetivos de taller fueron:
- Generar un grupo impulsor para incidir, desde las iglesias, universidades y sociedad civil, para la implementación del Acuerdo de Paris desde una perspectiva de justicia climática.
- Promover un esfuerzo de incidencia que articule la Agenda 2030, el Marco de Sendai y el Acuerdo de Paris para la acción climática en diálogo y coordinación con múltiples actores de la región de América Latina y el Caribe.
El taller hizo público un pronunciamiento donde se resalta:
Las consecuencias del cambio climático nos retan a discernir sobre modelos de producción amigables con el ambiente, lo cual implica el uso de tecnologías y sistemas de producción no contaminantes, nuevos estilos de vida, nuevos sistemas y tecnologías que permitan el equilibrio y revertir los daños generados por el cambio del clima. Esta es una tarea que involucra a todos los sectores de la sociedad con responsabilidades compartidas pero diferenciadas.
Comenzar esta acción desde los más vulnerables, en territorios degradados es fundamental para hacerlo con una visión de justicia climática que considera la naturaleza y el ser humano con iguales derechos.
Queremos desafiarles, desde Centroamérica y el Caribe, dicen, una de las regiones altamente vulnerables y más afectada por el cambio climático a que construyamos nuevos paradigmas de sustentabilidad, que mantenga el umbral de cambio del clima bajos los 1.5º C basados en las siguientes consideraciones.
- Financiamiento adecuado y suficiente para adaptación y superación de vulnerabilidades de los más pobres y excluidos
- Una fundamentación ética y moral de las negociaciones y decisiones sobre el clima en los próximos 30 años
- Concertar una agenda común, entre estados, sociedad civil y sectores interreligiosos, ambientalistas, articulados con la ciencia y tecnología, que apoye soluciones viables en el clima, incluyendo el cambio de energía fósil a energía renovables, cambio en estilos de vida consumista y procurar soluciones tecnológicas acordes a las necesidades sociales, ambientales y económicas de nuestras sociedades del sur.
- Garantizar el derecho al agua, a la tierra y el sostenimiento de los ecosistemas que permiten la reproducción de la vida en el planeta.
- Una gran alianza interreligiosa, facilitada por nuestros organismos ecuménicos globales, que permita alzar una voz unánime, con acciones concertadas y con posibilidad de influenciar a los grandes tomadores de decisiones, como gobiernos, empresa privada, naciones unidas, etc.
Por lo antes expuesto instan a los estados a que cumplan con sus compromisos de implementación de los acuerdos de Piras en los planes nacionales de mitigación y adaptación.
Invitan al sector privado, sectores académicos, sociedad civil en sus diferentes expresiones a construir una agenda común que fortalezca la alianza para el alcance de los ODS en materia ambiental.
Agradecen a redes globales como ACT Alianza, Consejo Mundial de Iglesias, por la contribución, esfuerzo y acompañamiento en los procesos de incidencia a diferentes niveles y invitan a incrementar el compromiso para conjuntamente construir alternativas de vida que permitan ser ejemplo del mundo que queremos construir.
Durante el taller se produjo un plan de trabajo, para los próximos años, que se enfoque en promover procesos de educación para el fortalecimiento de capacidades de incidencia, busque la articulación con sectores sociales, la academia, la empresa privada, los gobiernos y las organizaciones basadas en la fe y desarrolle una estrategia que permita incidir en la implementación de los acuerdos de París sobre el clima.