ECUADOR-
La campaña Como Nacido entre nosotros (CNEN) ha buscado catalizar a las iglesias evangélicas y organizaciones religiosas latinoamericanas para responder a la crisis migratoria de la región, informadas e inspiradas por una perspectiva teológica. Lanzada a mediados de 2019 en respuesta a la crisis venezolana, la Campaña pronto se expandió a toda la región de América Latina y el Caribe (LAC), enfocando su labor en cuatro áreas claves: 1) Sensibilizar a la iglesia sobre el mandato bíblico de servir y abogar en nombre de las personas que migran, 2) Movilizar y desarrollar acciones, 3) Incidir, e 4) Integrar a las personas que migran en las comunidades receptoras. CNEN es, en esencia, una iniciativa catalítica que busca no solo inspirar una respuesta, sino también unir a los aliados a nivel regional para lograr un impacto colectivo y una voz común.
Inicios
En el otoño de 2021, Tearfund solicitó una evaluación de la Campaña CNEN para guiar los futuros esfuerzos de planificación estratégica. La misma y la implementación de la evaluación se llevó a cabo desde septiembre de 2021 hasta abril de 2022. Los objetivos eran descubrir cómo la Campaña desarrolló su visión y objetivos, determinar sus resultados más significativos, identificar las prácticas más efectivas y recopilar ideas para esfuerzos futuros. Para ello se utilizó un enfoque de Cosecha de Resultados y ocurrió en cinco fases que incluyeron Diseño, Revisión de la Documentación y Redacción de los Resultados, Compromiso con los Informantes, Análisis e Interpretación y Resumen de los Hallazgos. Las fuentes de datos fueron principalmente documentos de la campaña, catorce entrevistas con organizadores e implementadores y una encuesta a los aliados de la misma.
A medida que el éxodo venezolano alcanzaba niveles de crisis sin precedentes, los asesores regionales de teología y defensa de Tearfund comenzaron a proyectar una respuesta. En 2018, redactaron y presentaron una propuesta en la reunión anual de la región de LAC de Tearfund, que condujo a la adopción de la migración como una prioridad regional. A principios de 2019, el equipo completo de asesores regionales de Tearfund redactó una propuesta para la campaña CNEN que incluía sus cuatro ejes de sensibilización, movilización, incidencia e integración. Se lanzó una Campaña piloto de seis meses en junio de 2019, cuyo objetivo principal era contrarrestar los mensajes xenófobos en las redes sociales con un enfoque en Colombia, debido a su proximidad a la crisis humanitaria venezolana. Después de una fuerte respuesta de los líderes religiosos y la necesidad cada vez mayor, en noviembre de 2019 se determinó que CNEN debería expandirse a nivel regional. Durante ese mismo mes, Brasil lanzó su propia Campaña CNEN nacional y autónoma.
La Campaña CNEN regional se desarrolló en tres fases. Durante cada una de ellas, la Campaña utilizó las redes sociales, reuniones de líderes religiosos, eventos de sensibilización, capacitación y educación, y esfuerzos de promoción para hacer avanzar sus cuatro objetivos. Con el tiempo, la visión de CNEN se ha refinado para ver un mundo en el que las personas tengan la opción de migrar o no. Aquellos que lo hagan, puedan hacerlo de manera segura, ser tratados
con dignidad e integrarse a las comunidades receptoras
A la fecha de redacción del informe presentado la semana pasada, la Campaña regional cuenta con 59 Aliados, de los cuales, el 36% son entidades eclesiásticas y el 64% son organizaciones confesionales. Geográficamente: En Mayo 2022 34% se ubican en la región andina, el 32% son regionales o globales, el 19% en Centroamérica, el 10% en el Cono Sur y el 5% en Norteamérica.
La Campaña es seguida por al menos 7.024 personas en las redes sociales. y ha llegado a casi 3 millones de personas a través de su contenido digital. ALC Noticias ha sido parte este proceso de comunicación.
CONCLUSIÓN
La Campaña CNEN demostró que el liderazgo religioso en América Latina están ansiosos por unirse para abordar una de las cuestiones más urgentes de la región, el de la migración. A lo largo del camino se han aprendido lecciones claves que, si se tienen en cuenta, tienen el potencial de conducir a una CNEN más fuerte e
impactante. También se ha producido un aprendizaje que puede brindar orientación para mejorar las estructuras, las políticas y los procesos de Tearfund a nivel regional y mundial.
En general, aunque la Campaña enfrentó desafíos en cuanto a financiamiento y personal, sin mencionar una pandemia mundial, aún así produjo resultados muy prometedores. Las y los evaluadores capturaron algunos de esos resultados, pero es seguro que hay muchas más historias esperando ser escuchadas. A medida que se habla con los Aliados y participantes de CNEN, hay anhelo por más, una sensación de que mucho es posible ahora que se han sentado las bases.
La crisis migratoria no va a desaparecer; ha venido para quedarse. La única pregunta que queda es…. ¿Cómo responderemos?