MÉXICO-
Leopoldo Cervantes-Ortiz-
Considerado como un hecho que llamó destacadamente la atención en el ámbito político mexicano previo a las elecciones presidenciales del próximo 2 de junio, el papa Jorge Bergoglio recibió en el Vaticano, con apenas dos días de diferencia, a las candidatas que representan a las principales fuerzas. Primeramente, el 13 de febrero, Xóchitl Gálvez, abanderada de los tres partidos de oposición (Acción Nacional, de la Revolución Democrática y Revolucionario Institucional), integrantes del Frente Amplio por México, renombrado recientemente como Fuerza y Corazón por México, tuvo una audiencia junto con su familia. Los detalles los ofreció hasta dos días después debido al compromiso que hizo con la sede papal. Autocalificada como “una mujer profundamente católica, practicante”, refirió que su charla con Bergoglio versó sobre la encíclica Fratelli tutti, inspirada en la vida de Francisco de Asís, la migración, el caso de los jóvenes asesinados en Salvatierra y Celaya, la violencia en el país e incluso de futbol. “En total estuve en el sitio 40 minutos, entre que llegué a la Catedral y me retiré”, afirmó.
La reunión fue en la Casa de Santa Martha, edificio que habita el pontífice. Las reacciones a esta entrevista han sido de diferentes tonos, pues van desde la franca aceptación hasta el rechazo de algunos sectores. Según la revista Proceso, Gálvez “le reafirmó su fe por Dios y la iglesia católica”, además de que intercambiaron puntos de vista intercambiaron puntos de vista “sobre la cultura del descarte, que consiste en la marginación a todo aquello que no produce, así como sobre diversas crisis que enfrenta la humanidad”. Ella dijo que consiguió la audiencia mediante una carta que envió al Vaticano, y que acudió con su esposo y sus dos hijos, además del diputado panista Santiago Creel Miranda, coordinador de su campaña.
En El País, la nota correspondiente señala que el dirigente religioso dijo a Gálvez: “Celebro que usted tenga el coraje que tiene”, a lo que agregó: “Yo le deseo el mejor de los éxitos”. La nota agrega que esta reunión “fue el objetivo prioritario de su viaje por Europa; su agenda de trabajo en Madrid, España, ha sido secundaria para aprovechar su visita a Roma, Italia. ‘Yo sí creo en la Santísima Providencia, mandé una carta, me contestaron y me dieron fecha, así fue’, relató”. El diputado Gerardo Fernández Noroña, por su parte, fustigó a Gálvez al referirse al compromiso de no divulgar las fotos del encuentro de manera inmediata: “Fue tan exitosa la visita de Bertha Xóchitl Gálvez al Vaticano, que es la hora que no le autorizan compartir imágenes”. Otras de las frases papales citadas por ella son: “Es difícil ser gobernante; no hay que dejarse llevar por el canto de las sirenas… Los líderes tienen la responsabilidad de conducir a los pueblos. Yo le deseo el mejor de los éxitos”. “Rayuela”, el editorial mínimo de La Jornada del 15 de febrero resumió el suceso como sigue: “Lleva más de 2 mil años de experiencia política: ¿por qué no habría de intervenir en contiendas electorales de cualquier país?”.
A su vez, Claudia Sheinbaum Pardo, candidata por la coalición gobernante Juntos Seguimos Haciendo Historia, que agrupa a los partidos Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), del Trabajo y Verde Ecologista, fue recibida por Bergoglio el jueves 15. En esa ocasión, el encuentro tuvo lugar en el despacho privado del Papa, y allí dialogó durante una hora con él. Sheinbaum, de familia judía, aunque no practicante, destacó que Bergoglio “le regaló grandes consejos de vida” y, en sus redes sociales, “expresó la ‘profunda admiración’ que le tiene por su pensamiento humanista”. El encuentro fue organizado por Adrian Pallarols, orfebre personal de Francisco. “El equipo de la candidata de Morena, PT y Partido Verde resaltó que en las imágenes, donde toma las manos de la ex jefa de Gobierno capitalino, Francisco no usa el solideo (gorro de tela en forma de casquillo que usa básicamente para cubrir la coronilla), lo cual es considerado como un encuentro más cercano, menos institucional”.
Sheinbaum añadió que “quienes me han escuchado, saben que en muchos de mis discursos repito una frase del papa Francisco que dice: ‘la única manera lícita de mirar de arriba a abajo a alguna persona es cuando le das la mano para levantarse’. Es una de las líneas más profundas y hermosas sobre la fraternidad y la igualdad que he escuchado”. Informó que le obsequió “unas hermosas piezas del pueblo wixárika [del occidente del país]” y dijo: “Además de ser el máximo representante de la Iglesia católica, la religión de la gran mayoría de mi pueblo, tengo una profunda admiración por su pensamiento humanista”. Se supo, también, que solicitó la bendición para una rosa de plata como regalo para los mexicanos, que entregaría al rector de la Basílica de Guadalupe, Efraín Hernández Díaz.
La citada nota de El País comenta que Gálvez evitó mencionar el encuentro de Sheinbaum con el Papa Bergoglio y que no “ha querido colgarse la medalla por ser la primera de los tres aspirantes en recibir la bendición papal”. Y la cita directamente: “No sé si ella crea en la Divina Providencia, yo sí creo” […] Mi fe y mi religiosidad está por encima de cualquier oportunidad política”. Todo ello ante la insistencia de los medios de comunicación. En las redes sociales colocó un video sobre su visita a Roma. Sobre el encuentro con Sheinbaum se puede ver otro video.
Queda allí este par de episodios preelectorales que, para los analistas más suspicaces, no deja de ser una muestra de que en los tiempos políticos propicios los actores implicados no vacilan en apelar a las fibras más profundas de los sectores sociales en su afán por obtener beneficios y, sobre todo, votos a su favor. Afortunadamente, la laicidad del sistema mexicano, siempre puesto a prueba desde las altas esferas del poder, ha puesto freno a manifestaciones aun mayores del oportunismo político que siempre aflora en estos contextos. Así lo expresó José Antonio Rincón en un editorial:
Pobre Francisco, obispo de Roma y sucesor de Pedro que, si recibió a una, tiene que recibir a la otra, aunque ninguna puede presumir ser una sincera cristiana o que acuda con un corazón contrito a recibir la bendición papal, además de que el propio evangelio aconseja la discreción en la oración, pues de otra forma se torna en una práctica farisaica. Aparentar puede ser redituable, aconsejaba el gran Maquiavelo. Si yo fuera el papa no recibiría a ninguna, pues no son jefas de estado y sólo acuden para lucrar con la visita.